Nunca pensé que esa respuesta que
te di aquella noche en medio de una de nuestras conversaciones fuera a molestarte
tanto y se te quedara tan bien grabada; si quieres saber la verdad, no, no fue eso
lo que pensé en primera instancia para responder; si quieres saber la verdad, deseaba estar
equivocada; si quieres saber la verdad, existe algún trasfondo para que haya dicho
eso en lugar de lo que realmente pensé; si quieres saber la verdad, te diré que
el me hayas dicho que no se trataba de eso me gustó; si quieres saber la
verdad, me agradó saber que te molestó aunque quizás no planeabas decírmelo pero
eso significa que de algún modo en alguna medida te importa; si quieres saber
la verdad, no me gusta que me dejes con dudas; si quieres saber la verdad, no
me parece justo que me castigues por algo que has hecho tú tantas veces y yo he
tenido que dejar pasar; si quieres saber la verdad, no me agrada que te quedes
con la idea de que estamos en una sintonía distinta porque definitivamente no
es así; si quieres saber la verdad, me gustaría poder regresar el tiempo para
arreglarlo y que no te hagas un falso concepto; si quieres saber la verdad, las
cosas que más disfruto de ti y más me hacen sonreír tienen que ver con los
pequeños detalles; si quieres saber la verdad, daría lo que fuera por tener esa
conversación recostados sobre la cama mientras me acaricias suavemente el
rostro y me miras fijamente sin perder detalle… aunque después de todo tal vez
nunca te enteres de la verdad.
marzo 13, 2012
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Lo dicho, dicho está. Quizá nos tengamos que arrepentir mucho tiempo, pero casi nunca, toda la vida.
ResponderEliminarAys, la verdad que dificil es aceptarla.
ResponderEliminarPodemos enceguecernos o no querer escuchar las verdades, pero la mayoría de las veces es solamente porque ya las sabemos.
ResponderEliminarDulce beso.