septiembre 30, 2010

Ya no te siento


Después de hablar, por unos días todo parecía volver a la normalidad… pero cada vez te siento más distante, más frío, ya no hay ese juego, ese coqueteo, ya no me haces sentir deseada, ya no me siento como Princesa a tu lado... ya no te siento.
Supongo que es normal después de lo que pasó, entiendo que no te nace y aquí nada es a fuerzas… pronto yo tampoco sentiré ganas.

septiembre 22, 2010

Después de la tormenta

Después de semanas de incertidumbre, de ansiedad, de insomnio, la calma regresa, poco a poco las cosas se van aclarando, coqueteos reservados, comentarios contenidos, la tensión sexual puede sentirse entre nosotros… finalmente hemos podido hablar con cierta calma y poner las cartas sobre la mesa, ninguno de los dos quiere marcharse pero también sabemos que no volverá a ser lo de antes, aún así disfrutaremos cada oportunidad, cada momento, viviendo esta historia sin tiempo.



Esta noche al escuchar tu voz sentí como mi cuerpo poco a poco desde los tobillos hasta mi cuello comenzó a erizarse, como si cada palabra me trajera tu aliento paseándose sobre mi piel, saber que sientes las mismas ganas que yo de perdernos un momento, la sensación de tus manos recorriendo mi pecho, no puedo evitar pasar los dedos entre mis piernas y la humedad que encuentro me delata… viene un ligero estremecimiento… ¿cómo puedes provocar de esa manera todo esto?


♫No todos los Principes se vestirán de azul♫♪

septiembre 11, 2010

Desasosiego

Ésta noche de insomnio no puedo impedir que mi cabeza de vueltas y vueltas por tu recuerdo, reviviendo besos, caricias, sudores, espasmos, jadeos, mordidas, miradas, abrazos, sonrisas, mimos… no sé si las cosas volverán a ser iguales entre nosotros, quiero pensar que sí, pero no puedo evitar la incertidumbre que hoy no me deja dormir, no sé porque me asalta, tal vez sea que tu compañía me agrada más de lo que pensé, quizás es que aún tengo tantas cosas guardadas que imaginé para ti, probablemente sea que contigo descubrí nuevas sensaciones, puede ser que me siento demasiado culpable de haberlo echado a perder, de lo que sí tengo la certeza hoy, es de que quisiera poder aferrarme a tu cadera mientras tus manos recorren con suavidad mi espalda una y otra vez, al tiempo que tus labios descansan sobre mi frente.


♫Estoy buscando melodías para saber cómo llamarte♫♪

septiembre 07, 2010

Caos

Pensé en enviar un mensaje, pero supongo que no quieres saber de mi; quise llamar, pero sería peor aún; busqué una canción, pero ninguna reflejaba lo que quería decir; intenté recordar una frase, pero fué inutil; tengo el día entero con un nudo en la garganta tratando de escribir este post, pero con todas las opciones me siento igual de estúpida, porque lo único que atino a decir es que jamás quise lastimarte, pero con nada reparo el daño, pero nada cambia los hechos.

septiembre 03, 2010

Hoy es día de comerte a besos (Cont...)

Me gusta sentir el calor de tu cuerpo sobre el mío, apenas puedo recuperar el aliento los besos suben su intensidad, te giro y me acomodo sobre ti, te arqueas con las sensaciones que mis manos provocan al acariciarte, mis labios te saborean, se deleitan a lo largo de tu cuerpo, me embriago con tu aroma, tenía tantas ganas de tenerte así… bajo lento, sin demasiada prisa, el tiempo apremia pero no me importa, cierro los ojos para que el sonido de tus gemidos se intensifique, me concentro en ellos, me gusta escucharte, el aroma que tu cuerpo desprende cuando estamos enredados en la cama, mi lengua traviesa te recorre lento y pausado, probando cada pedacito de tu hombría, te envuelvo con mis caricias, se mezclan mi saliva y tus fluidos, quiero sentir tu sabor en mis labios, mis ojos permanecen cerrados tratando de que mis sentidos se concentren en mi lengua, siento como tu cuerpo se tensa, escucho tus jadeos avisando que se acerca, te retuerces sobre la cama, mi pecho te cobija, mis labios suben, bajan, succionan, lamen, ya no puedes contenerte, siento como tu elixir inunda mi boca, salado y amargo, que momento más delicioso, no me aparto de ti, no quiero soltarte, tantas veces lo había imaginado… ¡QUÉEE MANERA! Es lo único que sale de tus labios, tus ojos permanecen cerrados, tu cuerpo completamente relajado, en lo que recuperas las fuerzas me acomodo sobre tu pecho, me abrazas y besas mi cabeza, mi frente, apenas acaricias mi espalda, creo que ya ninguno de los dos puede, ni quiere moverse… y la habitación 135 se convierte en el testigo mudo de aquel encuentro.


♫♪Deseada ternura, deseada locura de juegos prohibidos, desatando placeres, descubriendo como eres a solas conmigo♫♪